sábado, 11 de octubre de 2025

Una Noche de Captura celeste: Un Diario de Aventuras

Esta sesión fue una maratón de Messier y NGC, centrada en explorar algunos de los objetos de cielo profundo más fascinantes. Aquí va un pequeño resumen de mis objetivos:


 Cúmulos Abiertos: M39 y M29 (Constelación de Cygnus)





M39 (NGC 7092): Este es un cúmulo abierto relativamente cercano (a unos 800-1000 años luz) en la constelación del Cisne (Cygnus). Es una agrupación de estrellas jóvenes y brillantes que se dispersan lentamente. En las fotos, se ve como un grupo de joyas esparcidas sobre terciopelo oscuro.





M29 (NGC 6913): También en Cygnus, M29 es otro cúmulo abierto cuya distancia es un poco incierta (entre 4,000 y 7,000 años luz) debido a la gran cantidad de polvo interestelar que lo rodea. Capturar sus estrellas envueltas en esa neblina cósmica es un desafío que vale la pena.


 Cúmulos Globulares: M71, M56 y M92




M71 (NGC 6838): Situado en la constelación de la Flecha (Sagitta). Durante mucho tiempo se debatió si era un cúmulo abierto muy denso o uno globular, pero hoy se considera un cúmulo globular relativamente disperso, con una antigüedad de unos 9 a 10 mil millones de años.




M56 (NGC 6779): Un cúmulo globular en la constelación de la Lira (Lyra). A diferencia de otros cúmulos globulares que tienen un centro muy brillante, M56 es uno de los Messier menos luminosos, lo que lo convierte en un objetivo sutil y hermoso. Se encuentra a unos 32,900 años luz.




M92 (NGC 6341): ¡Una maravilla en Hércules! Este es uno de los cúmulos globulares más brillantes y antiguos del hemisferio norte. Aunque a menudo eclipsado por el más famoso M13, M92 es espectacular por derecho propio, una esfera densa de estrellas a unos 26,000 años luz.


¡Mi Favorito de la Noche! El Doble Cúmulo de Perseo

Mi gran victoria de la noche, y de la que me siento más orgulloso, es la captura del Doble Cúmulo de Perseo, formado por NGC 869 y NGC 884.




Este par es visible a simple vista y es un deleite para cualquier astrónomo aficionado. Ambos son cúmulos abiertos muy jóvenes (apenas unos 13 millones de años) y se encuentran a unos 7,600 años luz de distancia en la constelación de Perseo.


Lo que hace que mi imagen sea tan especial es que he logrado un procesamiento en el que los dos núcleos se ven perfectamente definidos y distintos en una sola toma de gran campo. La composición de estrellas azules y jóvenes que dominan ambos cúmulos es sencillamente impresionante. ¡La prueba de que la paciencia en la astrofotografía siempre rinde frutos!


¿Cuál de estos objetos es su favorito para fotografiar? ¡Cuéntenme en los comentarios!